Qué ver en Guadalajara, ¡12 lugares increíbles! (2024)

Si estáis pensando en viajar a Guadalajara, no lo dudéis. La ciudad castellano manchega, marcada por su proximidad a la capital, ha sabido conservar el bello patrimonio monumental e histórico que atesora en su casco viejo. Vamos a hacer un recorrido no solo por los lugares más emblemáticos que ver en Guadalajara capital sino también por aquellos otros de la provincia que se merecen que les dediquemos nuestra atención.

Guadalajara es una ciudad que resulta perfecta para una escapada de fin de semana, tiempo suficiente para conocer su casco antiguo y visitar los monumentos más significativos. Aunque lo ideal es dedicar algún día más para descubrir los encantos que atesora la provincia. Otra opción, si estamos visitando Madrid, es simplemente pasar el día pues desde la capital se tarda apenas una hora en llegar.

En este post, basándonos en nuestra experiencia personal por Guadalajara capital y los alrededores, os hemos preparado una lista muy completa de nuestros lugares favoritos, los imprescindibles que no debéis perderos por nada del mundo. Si estáis preparados, ¡arrancamos!.

Qué ver en Guadalajara, ¡12 lugares increíbles!

1. El casco viejo de Guadalajara

Llegamos a la ciudad castellano-manchega y nos dirigimos al casco viejo donde vamos a encontrar los monumentos más interesantes que ver en Guadalajara. El corazón de la ciudad late en la plaza Mayor, uno de los lugares más frecuentados, a la que se asoma el ayuntamiento, edificación de 1906 y estilo ecléctico. A pocos metros se erige la iglesia de Nuestra Señora de la Antigua, reconstrucción gótica de un anterior templo mudéjar.

Al otro lado de la plaza Mayor, en la antigua calle Santa Clara, hoy Teniente Figueroa, se halla el palacio Antonio de Mendoza y antiguo convento de la Piedad, un edificio del siglo XVI cuyos mayores tesoros son el patio plateresco y la escalera renacentista. En la cuesta de San Miguel aparece la capilla de Luis Lucena, construida en ladrillo en el siglo XVI, uno de los edificios más emblemáticos que ver en Guadalajara, y también uno de los más singulares por su estilo caprichoso.

Si subimos a la parte más alta de la calle Mayor nos encontraremos la iglesia de San Nicolás, en la plaza del Jardinillo, que guarda el sepulcro de Rodrigo de Campuzano, tallado en el siglo XV a semejanza de El Doncel de la catedral de Sigüenza. En la céntrica plaza de Santo Domingo, al sur del coqueto parque de la Concordia, se alza la iglesia de San Ginés y su preciosa fachada de piedra, donde podéis ver varios sepulcros.

Desde la plaza de Santo Domingo bajamos por la calle Carrera hasta llegar a la iglesia y fuerte de Santo Domingo, que alberga el panteón de la familia Mendoza, que imita al de los Reyes de El Escorial. Y otra de las edificaciones defensivas de la ciudad es la torre de Álvar Fáñez. Ya veis que el casco antiguo de Guadalajara cuenta con una riqueza arquitectónica nada desdeñable, incluyendo algunos de sus monumentos más representativos que a continuación os iremos desgranando.

De todas formas, ya sabéis que somos fans acérrimos así que no os perdáis un free tour por Guadalajara pues nos permite una primera toma de contacto para luego organizar la visita a nuestro aire. Es una forma de explorar los rincones más interesantes guiados por quien conoce de primera mano la historia y la vida de la ciudad. Se trata de un recorrido ameno y entretenido y, además, es gratis, así que todo son ventajas. ¡Una actividad más que recomendable!

2. El palacio del Infantado

Nos vamos a la plaza de España, donde se encuentra el imponente palacio de los duques del Infantado, el edificio más característico e importante que ver en Guadalajara, y no es para menos. Su construcción comenzó en 1480 y no se dio por terminada hasta finales del siglo XV. Con posterioridad ha sufrido sucesivas reformas aunque su aspecto actual se debe a las labores de rehabilitación realizadas durante la década de 1960, ya que un incendio prácticamente lo destruyó en 1936.

Sorprende su portada que contiene una sucesión de figuras emblemáticas de la familia ducal de los Mendoza, e incluso del arquitecto Juan Guas. En el interior del palacio, además del extenso jardín, admiramos el hermoso patio de los Leones compuesto por dos galerías sustentadas por columnas. La inferior exhibe los leones enfrentados y la superior se dedica a animales mitológicos. Además acoge el Museo de Guadalajara.

ALOJAMIENTO EN GUADALAJARA

Guadalajara no cuenta con una oferta hotelera demasiado amplia. Nosotros nos hospedamos en el AC Hotel Guadalajara by Marriott, que está muy bien situado, muy cerca del palacio del Infantado, y tiene un precio magnífico.

3. La concatedral de Santa María la Mayor

En la plaza de Santa María sobresale la torre del edificio religioso más relevante que ver en Guadalajara, la concatedral de Santa María la Mayor, que se erige sobre los restos de una antigua edificación mudéjar. Su origen se remonta a finales del siglo XIII o principios del XIV, aunque no fue hasta el XVII cuando fue reformada casi por completo.

Sorprende de este templo la fachada principal en la que destacan las columnas que sustentan la galería que la rodea y su construcción en ladrillo visto en su totalidad. Con todo, lo más interesante se encuentra en su interior. Entre sus muros descubrimos el hermoso retablo mayor policromado de Francisco Mir, de 1624.

4. El panteón de la condesa de la Vega del Pozo y duquesa de Sevillano

A un lado del parque de San Roque, uno de los grandes pulmones verdes de la ciudad junto al parque de la Concordia, visitamos otro de los lugares imprescindibles que ver en Guadalajara, el panteón de la condesa de la Vega del Pozo y duquesa de Sevillano. María Diega Desmaissières y Sevillano, una de las grandes mecenas de la ciudad castellano-manchega, encargó al arquitecto Ricardo Velázquez Bosco la construcción del panteón familiar.

Las obras, que transcurrieron entre 1882 y 1916, dieron como resultado uno de los conjuntos arquitectónicos más sobresalientes de finales del siglo XIX. En su interior destaca el altar, donde vemos una interesante pintura del calvario, y en la cripta, el imponente conjunto escultórico que representa el cortejo fúnebre de la duquesa. Aunque lo más llamativo es la cúpula de cerámica vidriada, de inspiraciones bizantinas.

5. El palacio de la Cotilla

En el centro de Guadalajara se alza el palacio de la Cotilla o de los marqueses de Villamejor, en la plaza del mismo nombre. Fue mandado construir por Rodrigo Torres Messía, regidor perpetuo de la ciudad de Guadalajara, en torno al 1681, año en el que contrajo matrimonio. En la actualidad se utiliza como escuela municipal de artes. El robusto edificio muestra en su exterior un claro estilo barroco.

Ya en el interior, lo más relevante, es el sencillo patio sustentado por columnas, y la escalera y su barandilla, todo de madera. También el jardín con sus dos fuentes de mármol de Carrara. Pero la estancia más sorprendente y espectacular del palacio es el denominado «Salón Chino», una preciosidad que podemos visitar en la primera planta del edificio. En él sobresalen las dos columnas pero, sobre todo, la decoración con papel de arroz procedente de los talleres chinos de la dinastía Quing.

6. Sigüenza

Dejamos atrás la capital y buscamos otros lugares interesantes que ver en Guadalajara provincia. Nos vamos a Sigüenza, donde comenzamos nuestra visita en la plaza Mayor, para empezar a tomarle el pulso a la ciudad. Nos acercamos a la catedral, cuya construcción se inició en el siglo XII. Su mayor tesoro es la escultura funeraria de Martín Vázquez de Arce, conocida como El Doncel. Entradas a la catedral de Sigüenza y su museo.

También en el centro histórico se halla la iglesia de Santiago, un templo románico del siglo XII. En la plaza de la Cárcel vemos el edificio que acogía el antiguo Ayuntamiento y continuamos nuestro recorrido hasta la casa del Doncel o palacio de los marqueses de Bédmar que acoge el Archivo Municipal de Sigüenza. Y finalizamos nuestra visita en el castillo de los obispos de Sigüenza, un palacio-fortaleza reconvertido en Parador de Turismo.

ALOJAMIENTOS EN SIGÜENZA

Otra muy buena opción es establecer vuestra base de operaciones en Sigüenza y desde ahí conocer los alrededores. Además, la posibilidad de alojarse en un castillo siempre apetece. Y eso es lo que hicimos nosotros, hospedarnos en el Parador de Sigüenza, que además está muy bien de precio. Ahora bien, si lo que queréis es daros un capricho, os recomendamos INFINITVM, un hotel lleno de detalles, spa incluido.

7. Brihuega

Saltamos hasta Brihuega buscando sus notables monumentos y los campos de La Alcarria, que tan profusamente describió Camilo José Cela. La villa está rodeada por lienzos de la antigua muralla del siglo XII en la que merece la pena destacar el arco de Cozagón y la puerta de la Cadena. El monumento más emblemático es el castillo de Peña Bermeja, en el que destaca su capilla con detalles mudéjares, y el prado de Santa María, antiguo patio de armas, que ofrece unas vistas magníficas del valle del Tajuña.

Y junto al castillo, la iglesia de Santa María de la Peña. Otros ejemplos de arquitectura religiosa son la iglesia de San Felipe, templo gótico con reminiscencias románicas, y junto a la fuente de los Doce Caños, la iglesia de San Miguel y su portada románica, actual Auditorio Municipal. No olvidamos pasear por la plaza Mayor, conocida como El Coso, donde vemos el Ayuntamiento, las cuevas árabes y la Real Cárcel de Carlos III, que alberga la oficina de Turismo.

También conviene acercarse a la Real Fábrica de Paños, ejemplo de la arquitectura industrial del siglo XVIII y cuya notable puerta barroca da paso a unos recoletos jardines que vale la pena recorrer. La otra gran joya de la villa son los campos de lavanda de Brihuega. Para poder disfrutar de toda su belleza vuestra visita tiene que coincidir con la época de floración que suele tener lugar en el mes de julio. ¡Un auténtico espectáculo!

Ya veis que, a pesar de ser una población pequeña, cuenta con una enorme riqueza monumental. Por ello nosotros, como hacemos en tantas ocasiones, optamos por reservar un free tour en Brihuega, ¡nos encantan! Nos explican al detalle la historia de la ciudad, con algunas curiosidades y anécdotas divertidas incluidas, y nos muestran los monumentos más significativos, y ¡además es gratuito! Si os apetece que os lo den todo hecho o si disponéis de poco tiempo, esta es una actividad absolutamente recomendable.

DÓNDE ALOJARSE EN BRIHUEGA

Si decidís hospedaros en Brihuega, como hicimos nosotros, tenemos para vosotros dos propuestas completamente distintas. Por un lado el hotel Castilla Termal Brihuega, un cinco estrellas rodeado de jardines y al que no le falta un solo detalle. La otra opción pasa por el Hostal Restaurante Villa De Brihuega, muy cómodo y agradable y superbien de precio.

8. Atienza

Situada en la comarca de la Serranía, el Cid Campeador se refirió a esta villa medieval como «peña muy fuerte», y hoy se sigue caracterizando por la silueta de su castillo. Os hablamos de Atienza, uno de los pueblos más bonitos que ver en Guadalajara, donde convergen la ruta del Cid, la ruta del románico rural, con algunos ejemplos más que sobresalientes que os iremos contando, y la ruta del Quijote.

Ya en la distancia descubrimos el castillo, uno de los emblemas de Atienza. Desde su torre del Homenaje disfrutamos de unas vistas espléndidas de toda la villa. A sus pies se halla la iglesia de Santa María del Rey, a la que se accede a través del cementerio. En nuestro descenso desde el castillo nos encontramos la iglesia de la Trinidad, donde podemos visitar el museo de La Caballada, dedicado a la fiesta declarada de interés turístico nacional que se celebra en la localidad.

Recalamos en el centro de Atienza, donde descubrimos la plaza de España, que acoge el ayuntamiento y la fuente de los Delfines, y la preciosa plaza del Trigo, con sus hermosas casas de arquitectura tradicional, y la iglesia de San Juan Bautista. El arco de Arrebatacapas sirve de unión entre ambas plazas. Si os gustan a rabiar los museos, en una primitiva iglesia románica descubrimos el museo de San Gil, de arte sacro, y el museo de San Bartolomé, dedicado a la arqueología y paleontología.

9. Hita

Llegamos a otro de los lugares imprescindibles que ver en Guadalajara provincia, patria de acogida del arcipreste Juan Ruiz. Estamos en Hita, que permaneció bajo el señorío del marqués de Santillana hasta el siglo XVI. De la muralla del siglo XV que rodeaba toda la ciudad y llegaba hasta el castillo, hoy en ruinas, solo quedan algunos lienzos aunque sí se conserva el emblema indudable de la ciudad, la puerta de Santa María.

Uno de los espacios más concurridos es la plaza del Arcipreste de Hita, la plaza mayor a la que se asoman algunas fachadas de estilo mudéjar. En lo más alto de la villa domina la esbelta torre campanario de la iglesia de San Juan Bautista, en la destacan sus artesonados mudéjares, la pila bautismal que tiene esculpida en la base el árbol de la vida y la talla de la patrona de la Virgen de la Cuesta, patrona de Hita.

10. Pastrana

En el siglo XVI el secretario real Ruy Gómez de Silva contrajo matrimonio con doña Ana Mendoza de la Cerda, una de las aristócratas más influyentes de su época, y el rey Felipe II les otorgó los títulos de duques de Pastrana y príncipes de Éboli. Al establecerse en Pastrana, uno de los pueblos que hay que ver en Guadalajara, se inició un periodo de esplendor de la villa que se mantuvo hasta el siglo XVIII, cuando los descendientes de los duques trasladaron su residencia a Madrid.

Todavía se conservan algunos de los monumentos de esa época. Es el caso del palacio ducal, mandado levantar por la abuela de la princesa de Éboli, que encargó el proyecto en 1542 al arquitecto Alonso de Covarrubias. Sus cuatro torres se elevan sobre el patio central y los jardines traseros. La fachada está construida con piedras de sillería y en su interior, los artesonados platerescos contrastan con los acabados de inspiración mudéjar.

La iglesia colegiata de la Asunción, en la que destaca el retablo mayor y el magnífico órgano, acoge el museo parroquial de Tapices de Pastrana que guarda, entre otras joyas, una importante colección de tapices belgas del siglo XV, así como el panteón de los duques de Pastrana, obra del siglo XVII, donde descansan los restos de los príncipes de Éboli y de los duques del Infantado.

Otro de los símbolos de Pastrana es la fuente de los Cuatro Caños. Fuera del recinto antiguamente amurallado se encuentra el convento de San Francisco, que ocupa un restaurante, y el palacio Viejo, una antigua hospedería de la orden de Calatrava. Y finalizamos nuestra visita a Pastrana en la parte más baja del pueblo, donde se levanta el convento de San José, fundado por Santa Teresa de Jesús.

11.Trillo

Llamada la «puerta del Alto tajo», Trillo conserva sus imponentes edificios ante las Tetas de Viana, referencia obligada del paisaje alcarreño que popularizó Camilo José Cela. Nuestra primera parada nos lleva a la iglesia de la Asunción, de marcada factura renacentista, cuya torre campanario domina el cielo de la villa. Uno de los grandes símbolos de Trillo es el puente sobre el Tajo, fechado a mediados del siglo XVI. Preciosa es la imagen del río atravesando la ciudad.

También merece la pena visitar la casa de los Molinos, el edificio más antiguo del pueblo, y el rollo jurisdiccional del siglo XVII, levantado para celebrar el título de villa de Trillo. A dos kilómetros se halla el Real Balneario Carlos III, en el mismo lugar donde los romanos tuvieron unos baños medicinales. Y en el margen derecho del Tajo se alza lo que queda del monasterio de Óvila, fundado en el siglo XII por Alfonso VIII.

12. Barranco de la Hoz

Y para finalizar nuestra ruta por los lugares que ver en Guadalajara más interesantes, nos vamos al Parque Natural del Alto Tajo. Y es que nos apetece mucho disfrutar de la naturaleza en estado puro, otro de los grandes atractivos de la provincia castellano-manchega. Así que nos trasladamos a Corduente donde se encuentra el barranco de la Hoz. Y nada más llegar nos encontramos con el santuario de la Virgen de la Hoz, a orillas del río Gallo, incrustado en la roca, ¡una maravilla!

En este punto existe un aparcamiento donde dejamos el coche pues nuestro propósito es disfrutar del encanto y la riqueza natural de Guadalajara siguiendo la ruta barranco de la Hoz, una ruta circular de senderismo que no entraña ninguna dificultad y que se desarrolla por un espectacular cañón. Iremos descubriendo algunos de los miradores que existen en la zona y desde los que las vistas son sencillamente espectaculares.

Mapa de las mejoras cosas que ver en Guadalajara

Aquí os dejamos un mapa con todos los lugares interesantes que ver en Guadalajara capital y provincia. Están todos marcados para que vayáis a tiro hecho. ¡Esperamos que os sirvan!

Preguntas frecuentes sobre que ver en Guadalajara

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Pues hasta aquí llega nuestro recorrido por los lugares que ver en Guadalajara que no os podemos perder. Un viaje que nos permite descubrir, además de la capital castellano manchega, algunos de sus pueblos llenos de encanto y paisajes de infarto. Castillos medievales, iglesias románicas y algunos parajes naturales de ensueño. Un destino perfecto que combina patrimonio monumental, historia y naturaleza.

Si no conocéis Guadalajara, este artículo os servirá para una primera toma de contacto con la ciudad y su provincia y un acercamiento a la riqueza que atesora. Esperamos que os haya gustado tanto como a nosotros y os sirva de ayuda para preparar vuestra próxima escapada. Os dejamos además algunos de los artículos que hemos dedicado a Castilla-La Mancha, por si os apetece echarles un vistazo. ¡Os esperamos!