Nos desplazamos a una de las comunidades autónomas más desconocidas de toda España, Extremadura. Y es curioso porque, sin duda alguna, atractivos no le faltan. Un patrimonio histórico y artístico inconmensurable que ha llevada a la Unesco a declarar Patrimonio de la Humanidad algunas de las ciudades extremeñas más destacadas, y paisajes naturales increíbles, dan fe de la belleza de este rincón del país. Porque nos encanta y porque no nos podemos resistir a ella, acompáñanos a descubrir las mejores cosas que ver en Extremadura. ¡Vais a alucina!
A todo lo anterior, y por si fuera poco, se une una exquisita gastronomía que engloba desde todos los productos del cerdo ibérico, ¡bendita dehesa extremeña!, y los excelentes quesos de La Serena o la Torta del Casar, al mundialmente reconocido pimentón de la Vera o las deliciosas cerezas del Valle del Jerte. Con todo esto en mente, os proponemos un itinerario por los lugares que, después de nuestro último viaje a tierras extremeñas y desde nuestra experiencia personal, más nos han gustado, ¿os apuntáis?
Tabla de Contenidos
- Qué ver en Extremadura, ¡para alucinar!
- 1. Cáceres
- 2. Mérida
- 3. El Monasterio de Yuste
- 4. Alburquerque
- 5. Plasencia
- 6. El valle del Jerte
- 7. El Parque Nacional de Monfragüe
- 8. Trujillo
- 9. Guadalupe
- 10. El valle de Ambroz
- 11. La comarca de la Vera
- 12. Las Hurdes
- 13. Badajoz
- 14. Llerena
- 15. Robledillo de Gata
- 16. San Martín de Trevejo
- 17. Zafra
- 18. Jerez de los Caballeros
- 19. Fregenal de la Sierra
- 20. Olivenza
- Mapa de las mejores cosas que ver en Extremadura
Qué ver en Extremadura, ¡para alucinar!
1. Cáceres
Cáceres es nuestra primera parada en esta guía por los sitios más espectaculares que ver en Extremadura. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco es, en nuestra modesta opinión, una de las ciudades más bonitas de España. En ella podemos visitar el conjunto medieval más grande de Europa, que se mantiene prácticamente intacto. Si no disponéis de mucho tiempo, nuestros imprescindibles pasan por la Plaza Mayor donde encontramos el Ayuntamiento, la Torre de Bujaco y el Arco de la Estrella.
Por supuesto la Plaza de Santa María, en la que el edificio más destacado es la Concatedral de Santa María la Mayor, un bellísimo templo. Aunque no es el único, pues merece la pena detenerse en el Palacio Episcopal, el Palacio de la Diputación Provincial y el Palacio de Carvajal. Y no olvidamos el Palacio de los Golfines de Abajo, con una preciosa fachada plateresca y su torre medieval.
Imponente es la Iglesia de San Francisco Javier, en la Plaza de San Jorge, uno de los rincones más bonitos de Cáceres. También es interesante acercarse a la Iglesia de San Juan y a la Iglesia de Santiago de los Caballeros. En la «ciudad monumental» se suceden las casa-palacio como el Palacio de las Cigüeñas, el de los Toledo-Moctezuma o el Palacio Godoy. Majestuosa es la torre del Palacio de los Marqueses de Torreorgaz, actual Parador de Turismo.
MÁS SOBRE CÁCERES
No quiero extenderme en exceso porque hay tantísimos lugares que visitar en Extremadura y al final voy a terminar haciendo un artículo larguísimo, pero dejadme que os dé algunos consejos sobre Cáceres. Nada más llegar os recomiendo que reservéis el free tour por Cáceres, dura unas dos horas y es ideal para una primera toma de contacto. Si tenéis más tiempo, también os propongo el free tour por los misterios y leyendas, recomendación de primerísima mano.
Por otro lado, si estáis buscando un hotelito con encanto y que cumpla las tres b (bueno, bonito y barato), os recomiendo el NH Palacio de Oquendo. ¡Maravilloso y en pleno centro histórico de la ciudad! Por último, deciros que si buscáis una guía más completa sobre que ver en Cáceres o donde comer en Cáceres, os dejo los enlaces por si queréis echarles un vistazo.
2. Mérida
Nos desplazamos a la capital de Extremadura, Mérida, fundada en el año 25 a.C., y la más destacada de las ciudades romanas en Hispania, la gran Emerita Augusta. Pasear por sus calles es realizar un auténtico viaje en el tiempo pues la huella de los romanos es palpable en todos y cada uno de sus rincones. El reconocimiento de la Unesco como Patrimonio de la Humanidad está más que justificado y reúne méritos suficientes para que sea uno de nuestros imprescindibles en Extremadura.
En la Plaza de España, centro neurálgico de la ciudad, se sitúan dos de los monumentos más emblemáticos de la capital extremeña, la Concatedral de Santa María La Mayor y el Palacio de los Vera Mendoza, reconvertido en hotel. Muy cerca descubrimos el Arco de Trajano y, a escasos metros, el Templo de Diana. De camino al Puente Romano visitamos la Alcazaba, considerada la construcción musulmana más antigua de España.
Merece la pena acercarse al Convento-Hospital de Jesús Nazareno, que acoge el Parador de Turismo, la Basílica de Santa Eulalia, que alberga las reliquias de la santa que le da nombre, en cuyo exterior estuvo ubicado el Templo de Marte, y al Acueducto de los Milagros, ya a las afueras de la ciudad, del que se conservan algunos trechos. Para un conocimiento más profundo de la época romana, nada como el Museo Nacional de Arte Romano.
Y dejamos para el final los auténticos símbolos de Mérida. El Teatro Romano, que acoge el famoso Festival de Teatro Clásico, el Anfiteatro Romano, muy cerca del anterior, construidos ambos bajo los auspicios de Agripa y, por último, algo más alejado, el Circo Romano, de colosales dimensiones, pues tenía capacidad para 30.000 espectadores. Y si queréis conocer más lugares interesantes que ver en Mérida, podéis visitar el artículo que le hemos dedicado a la ciudad extremeña.
MÁS SOBRE MÉRIDA
Merece la pena tomarme con calma tu visita por Mérida porque verdaderamente tiene un conjunto patrimonial único. Permitidme algunas sugerencias: por un lado, el free tour por Mérida, ¡increíble!, por el otro, la visita al anfiteatro y el teatro romano, absolutamente obligatoria. Si tenéis tiempo, el tour por los misterios y leyendas de Mérida es maravilloso y es ideal para empaparse de la historia de la ciudad.
Mérida es un lugar fantástico para establecer tu base de operaciones porque estás prácticamente en el centro de la comunidad autónoma y tienes, sobre todo los pueblos de Badajoz, a un tiro de piedra. Si buscáis una recomendación de alojamiento, en mi caso estuve alojado en el Hotel Spa Aldealba y no tengo pegas: buena ubicación, excelentes instalaciones y precio asequible.
3. El Monasterio de Yuste
En la localidad cacereña de Cuacos de Yuste llegamos a uno de los lugares que ver en Extremadura que nos resultan más fascinantes. El Monasterio de Yuste fue fundado por los monjes jerónimos en el siglo XV y en el año 1556 Carlos V manifestó su deseo de retirarse al convento. Ello llevó a realizar numerosas reformas para adaptarlo a las necesidades de tan insigne huésped, que falleció allí el 21 de septiembre de 1558. Nos encanta el ambiente bucólico que allí se respira.
Y aunque el gran atractivo de Cuacos de Yuste es el monasterio, el pueblo es una preciosidad, así que os recomendamos que no desaprovechéis la oportunidad de hacer una visita porque cuenta con un pequeño centro con una arquitectura popular muy bien conservada. Así, destaca la bella Plaza Mayor porticada y la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, del siglo XVI, que conserva el órgano que el emperador mandó construir en Amberes para el Monasterio de Yuste.
4. Alburquerque
No queremos perdemos el Castillo de Luna, el principal punto de interés de Alburquerque, una encantadora villa medieval que en algunos momentos de su historia formó parte de Portugal, y que incluimos entre nuestros imprescindibles que visitar en Extremadura. Mandado construir por Álvaro de Luna, valido del rey Juan II de Castilla, desde su impresionante Torre del Homenaje obtenemos las mejores vistas de la población.
A los pies del castillo se sitúa la Iglesia de Santa María del Mercado, en uno de cuyos laterales encontramos unas tumbas antropomórficas. Nos trasladamos al barrio amurallado o Villa Adentro, el más antiguo de Alburquerque, al que accedemos a través de la Puerta de la Villa. Justo frente a ésta, la Iglesia de San Mateo. Interesante resulta también la visita al Convento Madre de Dios e Iglesia de San Francisco
CÓMO MOVERSE POR EXTREMADURA
Para moverte por la comunidad autónoma, lo suyo es que os hagáis con un coche de alquiler, si resulta que no tenéis vehículo propio. Nuestra recomendación es que echéis un vistazo al comparador de coches de Rentalcars.com, suelen tener los precios más bajos y nunca jamás hemos tenido ningún problema con ellos. Así que ya sabéis.
La otra opción que tenéis es hacer uso del transporte público. Omio es una fantástica opción y podéis consultar todas las opciones de autobuses que hay. Por último, también tenéis la opción de reservar actividades organizadas, como esta excursión a Guadalupe y Trujillo desde Cáceres, esta otra excursión a Monfragüe, Plasencia y Yuste desde Cáceres o esta excursión a Mérida desde Cáceres.
5. Plasencia
Nos vamos a la capital del Valle del Jerte pues tenemos muchas ganas de visitar Plasencia. Un lugar absolutamente privilegiado pues disfruta de dos catedrales, la Catedral Vieja y la Catedral Nueva, ambas unidas formando un conjunto de gran armonía. El centro neurálgico de la población lo hallamos en la Plaza Mayor donde nos recibe el Ayuntamiento en el que «el abuelo Mayorga» marca las horas.
Muy cerca está la Iglesia de San Esteban, sede canónica de numerosas cofradías que procesionan durante la Semana Santa. Nos llama la atención las enormes dimensiones de la Iglesia de San Vicente Ferrer, conocida también como Convento de Santo Domingo, actual Parador de Turismo. También se merecen una visita la Iglesia de San Martín, la más antigua de Plasencia, y la Iglesia de San Nicolás, muy visitada por sus retablos interiores.
En cuanto a la arquitectura civil, en la ciudad cacereña encontraremos numerosos palacios y casas señoriales. El más interesante de todos ellos es el Palacio del Marqués de Mirabel, con su espectacular balcón de estilo plateresco. Aunque no olvidamos el Palacio de los Monroy, también conocido como la «Casa de las Dos Torres». Si tenéis dudas, tenemos un post supercompleto dedicado a los sitios que hay que ver en Plasencia y que no debéis perderos.
MÁS SOBRE PLASENCIA
6. El valle del Jerte
En el noroeste de la provincia de Cáceres, y en el límite con las de Salamanca y Ávila, se extiende la comarca natural del valle del Jerte, que debe su nombre al río Jerte. Su paisaje, de gran belleza, alcanza su máximo esplendor en primavera, con los cerezos en flor. ¡Un espectáculo para los sentidos!
Podemos realizar una ruta para conocer la zona partiendo de Plasencia, «la perla del Jerte». Desde allí nos desplazamos hasta Valdastillas, la puerta de acceso al valle del Jerte, que se presenta como un magnífico mirador. Desde ahí saltamos al punto más alto de la región, Piornal, en el que abundan los cerezos, ¡que maravilla! Continuamos hasta Navaconcejo, y de allí a Cabezuela del Valle, uno de los pueblos más destacados de esta ruta pues su casco antiguo ha sido declarado Conjunto Histórico-Artístico.
Continuamos hasta Jerte, presidido por la Plaza de la Independencia y la Iglesia de la Asunción, y por último Tornavacas, la localidad que marca el punto final de este recorrido, ya próxima a la provincia de Ávila. Mención aparte merece la Reserva Natural Garganta de los Infiernos que se localiza entre Cabezuela del Valle y Jerte y se extiende desde la Sierra de Tormantos hasta la Sierra de Gredos.
7. El Parque Nacional de Monfragüe
Que en la provincia de Cáceres hay numerosos y espléndidos conjuntos monumentales es algo sobre lo que a estas alturas no tenemos la menor duda pero lo que a lo mejor no esperabais es que cuenta con formidables parajes naturales, lugares imprescindibles que ver en Extremadura. Os hablamos del Parque Nacional de Monfragüe, que se sitúa al norte de la provincia de Cáceres, en el triángulo que forman las ciudades de Plasencia, Trujillo y Cáceres.
Atravesado por los ríos Tajo y Tiétar, y encajado en una garganta formada por dos sierras, fue el primer espacio protegido de Extremadura. La oficina de información del parque se encuentra en Villarreal de San Carlos, en la que nos indican los lugares por los que podemos transitar así como los de mayor belleza tanto natural como histórica pues, dentro del parque, podemos ver los restos del Castillo de Monfragüe, junto al que hay una cueva que guarda interesantes pinturas rupestres, y la Ermita de Nuestra Señora de Monfragüe.
Constituye uno de los ejemplos más relevantes de bosque y matorral mediterráneo que acoge una sorprendente biodiversidad. Hay algunos miradores distribuidos por todo el parque en lugares de singular belleza paisajística desde donde podremos observar la evolución de algunas aves como el águila imperial ibérica, el buitre negro o la cigüeña negra. También hay algunas rutas de senderismo perfectamente señalizadas.
8. Trujillo
También en la provincia de Cáceres encontramos uno de los pueblos más bellos que ver en Extremadura. Trujillo, incluido en la asociación de Los Pueblos más Bonitos de España, es tierra de conquistadores pues de allí son oriundos Francisco de Orellana, descubridor del Amazonas y Francisco Pizarro, conquistador del Perú, cuya estatua preside la Plaza Mayor. En este punto de la ciudad confluyen alguno de sus monumentos más emblemáticos.
Es el caso de la Iglesia de San Martín de Tours que destaca por su voluminosidad, el Palacio de los Duques de San Carlos y el Palacio de los Marqueses de la Conquista, ambos con sus preciosos balcones esquinados tan característicos de la arquitectura extremeña. El conjunto lo completa el Palacio de los Marqueses de Piedras Albas. Por supuesto, no podéis perderos en el cerro «Cabeza de Zorro» el Castillo desde donde hay unas espectaculares vistas de la ciudad y sus alrededores.
Y aunque encontraréis una información mucho más completa en el artículo que hemos dedicado a todo lo que hay que ver en Trujillo inexcusablemente, no nos resistimos a dejaros algún que otro apunte más. Es el caso de la Iglesia de Santiago que guarda una talla del Cristo de las Aguas de gran valor artístico, la singular Iglesia de la Preciosa Sangre de Cristo y la Iglesia de Santa María la Mayor, desde cuya torre obtendréis una estupenda panorámica.
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9. Guadalupe
La vida del pueblo de Guadalupe gira en torno a su monasterio, un extraordinario conjunto monumental de interés histórico-artístico mandado construir por el rey Alfonso XI. El origen de la población se debe al hallazgo de la imagen de la Virgen de Guadalupe en el siglo XIII. En los siglos posteriores la población fue creciendo a medida que aumentaban los devotos que acudían a visitar a la Virgen.
Incluid el majestuoso Monasterio de Guadalupe, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, entre vuestros imprescindibles que ver en Extremadura. Impresionan sus enormes dimensiones y, en su interior, no se puede dejar de admirar el magnífico retablo mayor, algunas obras de Zurbarán y la Sala del Tesoro, que guarda piezas de incalculable valor donadas a la Virgen.
A los pies del monasterio se extiende la bella Plaza de Santa María con una hermosa fuente gótica que es, en realidad, una pila bautismal donde fueron bautizados los primeros indios traídos por Cristóbal Colón desde América. Bajo sus soportales hay numerosos locales de restauración y comercios. Aunque lo más bonito es pasear por las calles que se apiñan en torno a la plaza, en las que las preciosas casas con sus balcones de madera lo inundan todo con el color de sus flores.
MÁS SOBRE GUADALUPE
Estamos ante uno de los pueblos pertenecientes a la Asociación de los Pueblos más Bonitos de España y no es para menos. Guadalupe está declarada Conjunto Histórico-Artístico y es, para gusto de un servidor, uno de las localidades más coquetas y pintorescas de todo el sur de España.
Merece la pena pasear y descubrir cada uno de los rincones. Guadalupe es el lugar perfecto de toda Extremadura para dejarse perder, navegar sin rumbo y caer rendido a sus pies. En líneas anteriores os he dejado multitud de recomendaciones, pero mi sugerencia es que hagáis una visita guiada por Guadalupe. Merece mucho la pena con tantas referencias monumentales y un conjunto histórico tan relevante.
10. El valle de Ambroz
Pegado al valle del Jerte pero formando una comarca propia, visitamos el valle de Ambroz, separados ambos por una pequeña serranía. La capital de la comarca es Hervás, una localidad que no podemos dejar atrás en nuestra ruta por los lugares de mayor interés que ver en Extremadura pues sus calles, rincones y plazuelas sumergen al visitante en su rico pasado medieval.
Lo más atractivo es el Barrio Judío, magníficamente conservado y uno de los más importantes de España, que se extiende desde La Plaza al río Ambroz y el Puente de la Fuente Chiquita. Ya en la parte más alta de la población, visitamos la Iglesia Castillo de Santa María de Aguas Vivas, desde donde disfrutamos de una vistas magníficas, y la Iglesia de San Juan que llama nuestra atención con su llamativa fachada de olor rojo.
Además de la visita al Ayuntamiento, que cuenta con un precioso patio interior con columnas, os recomendamos acercaros al Palacio de los Dávila, que alberga el Museo Pérez Comendador-Leroux y su colección de esculturas y pinturas de Enrique Pérez Comendador y Magdalena Leroux.
11. La comarca de la Vera
Buscando lugares de increíble belleza que ver en Extremadura, llegamos a La Vera, en la vertiente sur de la Sierra de Gredos. Sorprenden los valles de paredes escarpadas, excavados por la erosión fluvial, atravesados por los ríos Ambroz, Tiétar, Jerte y algunos afluentes del Tajo, que convierten esta comarca en un auténtico vergel. Y si hablamos de La Vera tenemos que hablar del pimentón, un auténtico tesoro de la gastronomía, que constituye uno de sus principales cultivos.
En esta zona de la comunidad autónoma extremeña hay algunos pueblos que han sabido conservar su característica arquitectura popular y bien merecen una visita. Es el caso de Jaraíz de la Vera, capital de la comarca, donde lo más relevante son la Iglesia de San Miguel y la Iglesia de Santa María, además del Palacio del Obispo Manzano y, por supuesto, el Museo del Pimentón. Desde aquí llegamos en un momento a Cuacos de Yuste y el impresionante Monasterio de Yuste.
Nos gusta mucho Garganta de la Olla, uno de los pueblos más bonitos de la zona, con un bello conjunto histórico en el que sobresale la Plaza Mayor. En Jarandilla de la Vera podemos visitar el Castillo de los Condes de Oropesa, donde se alojó Carlos V mientras duraron las obras del Monasterio de Yuste, hoy Parador de Turismo. El pueblo más alto de la comarca es Guijo de Santa Bárbara, con unas vistas imponentes, y cerca de la Cueva de Viriato.
12. Las Hurdes
Otro rincón maravilloso que visitar en Extremadura y seguramente uno de loas más desconocidos de toda la comunidad. Os hablamos de la comarca de Las Hurdes, en el límite con Salamanca. Podremos disfrutar de un paisaje natural de extraordinaria belleza caracterizado por su escarpada orografía en la que predominan los tupidos bosques de castaños y robles y picos montañosos de gran atractivo.
Podemos empezar nuestra ruta en El Ladrillar, donde se combina sabiamente arquitectura, paisajes y una fantástica gastronomía basada en la miel y el polen. Desde aquí atravesamos el puerto de montaña de Casares, un camino conocido como «el balón de las Hurdes», que resulta particularmente atractivo por las impresionantes vistas que ofrece de la zona hasta llegar a Casares de las Hurdes, donde nos reciben las casa de pizarra y barro tradicionales de esta zona de alta montaña.
Continuamos hasta Nuñomoral, una de las poblaciones más importantes de la zona, rodeada de una frondosa vegetación y atravesada por numerosos caminos y senderos que invitan a agradables paseos. Seguimos nuestro recorrido hasta Cambroncino donde visitamos el monumento más relevante de Las Hurdes, la Iglesia de Santa Catalina o de Las Lástimas, y muy cerca, el Valle Clara, un paraje de exuberante vegetación salpicado de árboles frutales.
13. Badajoz
Cambiamos de provincia y nos vamos a Badajoz, un destino turístico fuera de las rutas habituales pero que se merece que le hagamos una visita. La capital pacense es la eterna olvidada y sus encantos se ven eclipsados en muchas ocasiones por la belleza de otras grandes ciudades extremeñas, pero nos hemos propuesto descubrirla en este recorrido por los lugares que hay que ver en Extremadura.
El edificio más emblemático de Badajoz es la Alcazaba árabe que, situada en la cima de una colina, conserva parte de sus murallas y alguna de sus puertas, entre las que sobresale la Puerta de Palmas por sus torres circulares y la Puerta del Capitel, que da acceso al recinto fortificado. En la Alcazaba destaca la Torre de Espantaperros, que guarda gran parecido con la Torre del Oro de Sevilla. Y justo delante la Plaza Alta, muy atractiva con sus fachadas de color rojo.
En la Plaza de España se erige el Ayuntamiento y la Catedral de San Juan, muy austera. En el entorno de esta última vemos el conjunto de barroco tardío mejor conservado de la ciudad, el Convento de las Carmelitas, así como la Iglesia de la Concepción, obra de Ventura Rodríguez, y la Iglesia de San Andrés. Si os apetece iros de museos, dos sugerencias: el Museo de Arte Contemporáneo (MEIAC) y el Museo de Bellas Artes.
MÁS SOBRE BADAJOZ
14. Llerena
Saltamos a Llerena y nos sorprende la Plaza Mayor, con sus soportales de piedra y un marcado estilo mudéjar. La preside el Ayuntamiento junto al que vemos la cárcel vieja y la Iglesia de Nuestra Señora de la Granada. Desde aquí podemos acceder al Convento de Santa Clara, visita obligada para los más golosos por sus famosos «corazones de monja». En el entorno de la plaza también se ubica el Palacio Episcopal, que acogió el Tribunal de la Santa Inquisición.
Si tomamos la calle Santiago podremos pasear por el casco histórico de Llerena y nos llevará a la Iglesia de Santiago y al Hospital de San Juan de Dios. Otros puntos de interés son el Palacio de los Zapata, donde tenía su sede el Santo Oficio, y la Iglesia de la Merced, actual Casa de la Cultura. Y para terminar de conocer Llerena podemos darnos una vuelta por las murallas y las dos puertas que se conservan.
15. Robledillo de Gata
De vuelta a la provincia de Cáceres descubrimos en plena Sierra de Gata un pueblo precioso, incluido en la asociación de Los Pueblos más Bonitos de España, y que reúne méritos más que suficientes para formar parte de nuestra ruta por los lugares más interesantes que ver en Extremadura. Os hablamos de Robledillo de Gata, que ha sabido conservar su esencia en la arquitectura de sus casas, construidas utilizando materiales tradicionales como la pizarra y el adobe.
Un pueblo absolutamente encantador que esconde pequeñas cascadas en rincones ocultos que podemos descubrir dando un paseo por el río donde, instalado en un molino antiguo, se encuentra el Museo del Aceite. Si subimos a la parte alta de Robledillo conviene no perderse la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, del siglo XVI, además de la Ermita del Cordero y la Ermita del Humilladero, ambas del siglo XV, y la Ermita de San Miguel de la Vendimia.
16. San Martín de Trevejo
Otro pueblo con un encanto especial, que forma parte de la asociación de Los Pueblos más bonitos de España, es San Martín de Trevejo, junto a la frontera con Portugal y en el límite con Salamanca, provincia a la que perteneció hasta 1833. Además tiene la particularidad de compartir con Valverde del Fresno y Elijas la fala, una variedad lingüística reconocida por la Unión Europea y declarada por la Junta de Extremadura Bien de Interés Cultural.
La población, declarada Conjunto Histórico-Artístico, ha sabido mantener la arquitectura tradicional caracterizada por las fachadas de piedra de las viviendas, a las que se accede por unas escalinatas con peldaños de granito. Da gusto pasear por la Plaza Mayor, con soportales, y detenerse en la Torre del ampanario, la Iglesia de San Martín de Tours y el Convento de San Miguel. Y ya en los alrededores, una antigua almazara acoge el Museo del Vino y del Aceite.
17. Zafra
Zafra es uno de los grandes pueblos de la provincia de Badajoz cuyo origen árabe se palpa en sus casas encaladas, sus patios y el encanto andaluz que lo acompaña. De hecho fue bautizada como Sevilla la chica. Su atractivo radica también en un espléndido conjunto monumental, declarado Conjunto-Histórico Artístico, uno de los más impresionantes de la provincia pacense, así que inexcusablemente tenemos que ver en Extremadura esta belleza de población.
Podemos acceder al casco antiguo a través de la Puerta de Jerez, el Arco del Cubo o la Puerta del Palacio, que nos permiten descubrir la Plaza Chica, con un original empedrado y soportales de ladrillo sobre columnas de piedra. Desde aquí, y a través del Arquillo del Pan con su Capilla de la Esperancita, llegamos a la Plaza Grande, también con soportales y aires mudéjares, donde desemboca la calle Sevilla, la arterial principal de Zafra, peatonal y comercial, siempre bulliciosa y animada.
En esta misma calle se sitúa el Convento de Santa Clara y, muy cerca, Casa Grande, un palacio renacentista del siglo XVII con un interesante patio de influencias italianas y portada de mármol. El Palacio de los Duques de Feria, actual Parador de Turismo, cuya parte más antigua corresponde al Alcázar, sobresale por su Torre del Homenaje, y está unido al Convento de Santa Marina.
MÁS SOBRE ZAFRA
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18. Jerez de los Caballeros
¡Otra parada que no os podéis perder! De origen fenicio y romano, Jerez de los Caballeros fue también un importante enclave árabe, lo que se aprecia claramente en el trazado de sus calles, estrechas y empinadas, por las que apetece pasear descubriendo cada uno de los rincones del casco antiguo, declarado Conjunto Histórico-Artístico.
Podemos comenzar nuestra visita a este pueblo tan bonito que ver en Extremadura en la Plaza de España, presidida entre palmeras por la Iglesia de San Miguel. No os perdáis su preciosa torre barroca, ¡es una maravilla! Y donde vemos también el Palacio del Bachiller Martínez de Logroño y la antigua Casa Consistorial.
De su esplendoroso pasado árabe se conserva la muralla con 18 torreones de los 22 que tenía y dos puertas, la Puerta de la Villa y la Puerta de Burgos. A un lado del recinto amurallado, tras el Parque de la Morería, vemos el Castillo y sus dos torres, la Torre del Reloj y la Torre del Homenaje, desde donde tendréis la mejor panorámica de toda Jerez de los Caballeros.
19. Fregenal de la Sierra
Entre grandes extensiones de la dehesa extremeña y en el límite con la provincia de Huelva, distinguimos Fregenal de la Sierra, una preciosa localidad de gran tradición gastronómica. Su Plaza Mayor, con bellos soportales medievales del siglo XIII presidido por el Ayuntamiento, es su centro neurálgico y uno de sus principales reclamos turísticos. También os recomiendo una visita a la Iglesia de Santa Catalina y la Iglesia de Santa Ana.
El otro punto de interés lo encontramos en el Castillo, un recinto erigido por los caballeros templarios en el siglo XIII que conserva la Torre del Homenaje, con una puerta gótica decorada con la media luna y la cruz griega, símbolo de la Orden del Temple. Lo más curioso es que lo que fue patio de armas del castillo está hoy día ocupado por la plaza de toros. Y la Iglesia de Santa María del Castillo forma parte también de este recinto, siendo su campanario una de las antiguas torres del castillo.
20. Olivenza
Olivenza formó parte del país vecino, Portugal, hasta 1801 en que se firmó el Tratado de Badajoz y pasó a ser definitivamente española. Y esta circunstancia es precisamente la que le ha conferido a esta población una mezcla de culturas y tradiciones muy interesantes. Es una localidad española que no renuncia a su pasado luso. Ello es bien visible en la Puerta del Calvario, la única que se mantiene del recinto amurallado, en cuyo centro aparece el escudo de Portugal.
El Castillo, mandado construir por el rey portugués Dinis I y su hijo Alfonso VI, destaca por su impresionante Torre del Homenaje de 40 metros de altura. Desde aquí se puede disfrutar de las mejores vistas de Olivenza. En la Plaza de la Constitución, el Palacio de los Duques de Cadaval, de estilo manuelino, acoge el Ayuntamiento, con una amplia fachada blanca y el precio arco que rodea la puerta.
El otro punto destacado de esta bella localidad que tenemos que visitar en Extremadura, si nos desplazamos a esta comunidad autónoma, es la Plaza de España. De reminiscencia portuguesas, llama nuestra atención su llamativo pavimento y las palmeras que la rodean. En ella se localiza el Palacio de los Marzales, con numerosas ventanas con mármol de la zona construido en la segunda mitad del siglo XVIII.
Mapa de las mejores cosas que ver en Extremadura
Y hasta aquí hemos llegado. ¡Más completo imposible! Como siempre, dejadme que os deje a continuación un mapa de Google con todas las recomendaciones que visitar en Extremadura que os dejo en líneas anteriores. De esta forma las podéis localizar fácilmente y organizaros una ruta a vuestro ritmo. ¡Espero que le déis utilidad!
¡Qué grande es Extremadura y cuanto tiempo necesitaríamos para conocerla entera! Meses, una vida entera. Con la de atractivos que hay, ha sido una tarea casi titánica, pero a continuación os dejo algunas de los mejores cosas que ver en Extremadura: Cáceres, Mérida, Badajoz, Plasencia, Trujillo, Guadalupe, Monfragüe, el valle del Jerte, el valle de Ambroz, la comarca de la Vera, las Hurdes, Alburquerque, Llerena, Robledillo de Gata, San Martín de Trevejo, Zafra, Jerez de los Caballeros, Fregeneral de la Sierra y Olivenza.
Si no tienes mucho tiempo y en cuatro o cinco días quieres tener una primera toma de contacto con la comunidad autónoma, déjame que te de algunas sugerencias con los imprescindibles de Extremadura, esto es, aquellos que tienes que visitar sí o sí: Cáceres, Mérida, Plasencia, Trujillo, Guadalupe, Monfrague, la comarca de la Vera, Zafra y el Monasterio de Yuste.
Pues como te decía, ¡toda una vida! Pero como no siempre tenemos el tiempo que nos gustaría, creo que una semana es una cantidad de días estupenda para conocer los principales lugares de interés, lo que no quita que le puedas dedicar más tiempo, ¡Extremadura se merece todo esto y más!
Pues aquí nos despedimos de todos estos lugares increíbles que ver en Extremadura. ¿Sorprendidos? Pues hemos de reconocer que la selección ha sido difícil y hemos tenido que dejarnos otras otros muchos que prometemos recuperar en próximos artículos. Entre dehesas, valles y montañas, castillos y palacios, catedrales, iglesias y conventos nos ha recibido una región sabia y llena de matices, tan injustamente olvidada en tantas y tantas ocasiones.
Además, su situación geográfica la convierten en el punto de partida ideal para acercarnos a tierras castellanas, conocer Galicia o Andalucía, o desplazarnos a la vecina Portugal. Esperamos que os haya gustado nuestro recorrido por esta bella comunidad autónoma, que hemos preparado sin otro criterio que nuestros gustos personales y que, por supuesto, no tiene carácter exhaustivo. Y si os habéis quedado con ganas de más, os emplazamos a que echéis un vistazo a algunos de posts que hemos dedicado a Cáceres y Badajoz.
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